Con una cuidadosa preparación, viajar durante el embarazo puede ser seguro, pero hay riesgos y retos adicionales a tener en cuenta. Las mujeres embarazadas pueden tener un mayor riesgo de contraer una infección y/o desarrollar complicaciones graves a causa de ciertas infecciones, que también pueden afectar al bebé nonato. Es importante que consulte a un proveedor de atención médica o visite una clínica de salud de viaje para hablar sobre sus planes de viaje, preferiblemente seis semanas antes de viajar.
El momento de viajar
El momento más seguro para viajar es entre las semanas 18 y 24 del embarazo. La mayoría de las emergencias obstétricas frecuentes se producen en el primer y tercer trimestre. La decisión de viajar debe hacerse en consulta con el médico. Discuta acerca del propósito del viaje, destino(s), duración, actividades planeadas, subyacentes complicaciones médicas y/o relacionadas con el embarazo y la atención médica disponible en otros países. Si usted decide viajar durante el embarazo, asegúrese de que usted tiene un seguro médico de viaje adecuado. Revise su póliza y la cobertura que proporciona, ya que la mayoría de las pólizas no cubren automáticamente las condiciones relacionadas con el embarazo o la atención hospitalaria para los bebés prematuros.
Vacunas
En general se recomienda que las mujeres embarazadas eviten las vacunas vivas (por ejemplo, sarampión, paperas y rubéola), sin embargo, las vacunas inactivadas se consideran seguras (por ejemplo, la hepatitis B). La decisión de vacunarse durante el embarazo debe ser evaluada con su proveedor de atención médica, teniendo en cuenta factores tales como su salud personal, el destino, la duración del viaje y el riesgo de contraer la enfermedad.
Malaria
La malaria podría causar graves problemas de salud a la madre y su bebé nonato. Una mujer embarazada quizá deba considerar el evitar visitar zonas donde se produce la transmisión de la malaria. Si no puede evitar viajar a un área donde la malaria está presente, tenga un cuidado especial para protegerse de las picaduras de mosquitos. Consulte a un profesional de la salud para discutir si se necesitan medicamentos contra la malaria para reducir el riesgo de infección, y si es así, qué medicamentos son apropiados. Busque atención médica de inmediato si tiene fiebre durante un viaje o cuando regrese a casa. Informe a su proveedor de atención médica que usted ha estado viajando a un área donde la malaria está presente.
Riesgo al transportarse
Use siempre el cinturón de seguridad ya sea que viaje en avión, coche o tren. Cuando utilice una correa diagonal con un cinturón de caderas, las correas deben ser colocadas cuidadosamente encima y por debajo de su estómago. Si sólo un cinturón de cadera está disponible, sujételo en el área de la pelvis, por debajo de su estómago.
Viaje aéreo
Las viajeras embarazadas normalmente pueden viajar en avión con seguridad. En ausencia de complicaciones médicas u obstétricas, las mujeres embarazadas pueden volar con seguridad hasta la semana 36 de gestación. La mayoría de las aerolíneas restringen los viajes al final del embarazo o pueden requerir una confirmación escrita de un médico. Consulte con la aerolínea respecto a sus requisitos antes de reservar su vuelo. Las mujeres embarazadas tienen un mayor riesgo de desarrollar coágulos sanguíneos conocidos como trombosis venosa profunda (TVP). El riesgo de la TVP puede reducirse al levantarse y caminar alrededor de vez en cuando, hacer ejercicio y estirar las piernas mientras se está sentado y seleccionar un asiento de pasillo cuando sea posible. Recuerde usar zapatos cómodos y ropa suelta. El médico puede recomendarle otras formas de reducir su riesgo, tales como el uso de medias de compresión.
Cinetosis
Ciertos medicamentos utilizados para tratar las náuseas y los vómitos durante el embarazo también pueden ser eficaces para aliviar la cinetosis. Si usted piensa que podría experimentar mareos durante su viaje, hable con su proveedor de atención médica sobre el uso de estos medicamentos.
Riesgos ambientales y recreativos
Las mujeres embarazadas deben recordar hablar de sus planes de viaje con un proveedor de cuidado de la salud, incluyendo las posibles actividades recreativas planificadas o potenciales, ya que algunas no son recomendables o pueden requerir precauciones adicionales.
Altitudes elevadas
Se recomienda que las mujeres embarazadas eviten altitudes superiores a 3.658 metros (12.000 pies). Para los embarazos de alto riesgo y las mujeres en las últimas etapas del embarazo, las altitudes deben limitarse a 2.500 metros (8.200 pies). Las mujeres con complicaciones relacionadas con el embarazo deben evitar la exposición innecesaria a altitudes elevadas. Tenga en cuenta que la mayoría de los destinos de gran altitud están lejos de los servicios de atención médica. Recuerde que debe discutir todas las actividades programadas con su proveedor de atención médica.